Hay momentos en la vida que hacen que gire la tortilla. Son momentos muy lúcidos y suelen coincidir con crisis o con haber aplicado la conciencia a las circunstancias que la provocaron.
Con la vida tan ajetreada que tenemos lo dificil es estar consciente en el aquí y ahora. Es necesario sopesar en qué punto de nuestra vida estamos y la conciencia plena es fundamental para tener una visión clara de hacía dónde vamos y si ese era el camino que deseamos tomar o ha cambiado algo y nuestros deseos ya no son los que eran hace un tiempo.
Para que la vida cambie debemos focalizar lo que deseamos a diario. Dejarnos llevar por una corriente que nos lleva directo hacia allí y sintonizar con esta corriente cuantas más veces mejor en el día, aunque lo ideal seria ponernos en la frecuencia constante de esa corriente.
El giro de la tortilla es causal, responde a un cambio de nuestra vibración que se alinea con aquello que estamos sintiendo y viene directo y rápido a nosotros.
Así que si ponemos conciencia a nuestros deseos y nos dejamos llevar por la corriente, en breve conseguiremos aquello en lo que nos enfocamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinión es importante para mi. Te la agradezco de antemano.